"los comportamientos adquiridos durante la infancia nos acompañan siempre, y aunque hayamos conseguido, a fuerza de una gran voluntad, mantenerlos a raya, agazapados en un lugar tenebroso de la memoria, cuando menos lo esperamos nos saltan a la cara como gatos enfurecidos"
['el cuerpo en que nací' - guadalupe nettel, 2011]